Desacralizar al jefe de Estado; no es omnipotente, no resuelve todo

Francisco Rodríguez

Hace apenas unas décadas, platicando con José Iturriaga en su biblioteca del barrio de Santa Catarina, en Coyoacán, el viejo sabio pensaba en voz alta sobre la enorme complejidad de la estructura del mexicano. Eran los mejores años de Iturriaga, y dedicaba a ellos lo mejor de sus reflexiones siempre acertadas.